¿Que es y cuáles son los tipos de hepatitis?

tipos de hepatitis

¿Que es y cuáles son los tipos de hepatitis?

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La hepatitis es la inflamación del tejido del hígado. Algunas veces esta enfermedad no produce síntomas, mientras que en algunos otros casos, hace que los ojos y la piel se tornen amarillentos (ictericia), síntoma muy característico de personas con algún problema en el hígado. Otros síntomas relacionados con esta enfermedad incluyen: pérdida de apetito, vómito, cansancio, dolor abdominal y diarrea. Se puede clasificar de diferentes formas dependiendo del tiempo que le toma.

La hepatitis es comúnmente causada por distintos virus conocidos como virus de la hepatitis A, B, C, D y E. Además de la hepatitis causada por virus, también puede ser consecuencia de otros factores como:

–      Consumo de alcohol

–      Algunos medicamentos

–      Exposición a toxinas industriales o naturales

–      Infecciones no virales

–      Enfermedades autoinmunes

La hepatitis A y E son principalmente contagiadas por agua y alimentos contaminados. La hepatitis B es principalmente transmitida por actividad sexual (la A y la C también, aunque no son su principal forma de contagio), aunque también puede ser transmitida de madre a hijo durante el embarazo o durante el nacimiento. La hepatitis C es transmitida comúnmente a través de sangre contaminada, siendo las agujas compartidas por los consumidores de drogas una de las principales formas de contagio. La hepatitis D solo se puede dar en personas que ya estén infectadas con hepatitis B.

 Alrededor del mundo, en el 2015, se registraron 114 millones de casos de hepatitis A, 343 millones de casos de hepatitis B crónica y 142 millones de casos de hepatitis C crónica [1]. La hepatitis es responsable de más de 1 millón de muertes cada año y muchas de estas son principalmente atribuidas al cáncer de hígado.

¿Cuáles son los síntomas de la hepatitis?

La hepatitis se puede presentar de diferentes formas que van desde un estado carente de síntomas (asintomática) hasta una falla hepática aguda. La forma aguda de la hepatitis, causada generalmente por infecciones virales, está caracterizada por un conjunto de síntomas generales (comunes para muchas enfermedades) que terminan por resolverse sin necesidad de algún tipo de intervención. La hepatitis crónica se presenta de forma similar, pero puede manifestar sintomatología relacionada específicamente con el mal funcionamiento del hígado con inflamación sostenida y daño al órgano.

Síntomas de la hepatitis aguda:

 En el caso de la hepatitis aguda, el inicio de la enfermedad se caracteriza por presentar síntomas inespecíficos y similares a los de la influenza, los cuales son muy comunes en diversos tipos de infecciones virales agudas. Dentro de estos podemos resaltar la fatiga, nauseas, vómito, pérdida de apetito, dolor de articulaciones y jaquecas. Cuando se presenta fiebre, es más común que suceda en hepatitis aguda por el virus A y el E. Otros síntomas más específicos de una enfermedad hepática incluyen un color obscuro de la orina y heces en colores pálidos. 

hepatitis aguda

El tono amarillento de la piel y de los ojos se presentan alrededor de entre una y dos semanas después de la fase inicial y puede durar hasta cuatro semanas. En este punto, muchos de los síntomas de la fase temprana habrán desaparecido, pero los pacientes desarrollarán un alargamiento del hígado y dolor abdominal.

La fase de recuperación se caracteriza por la resolución de los síntomas de la hepatitis y posiblemente un alargamiento persistente del hígado. Todos los casos de la A y E se espera que se resuelvan en un transcurso de entre uno y dos meses. Muchos de los casos de hepatitis B también terminan resolviéndose por si solos, aunque en un periodo más largo (entre tres y cuatro meses. En cuanto a los casos de hepatitis C, pocos casos se resuelven por completo. 

Síntomas de la hepatitis fulminante:

Esta complicación es muy difícil de tratar y generalmente mortal y se presenta generalmente en casos de hepatitis B y D además también se presenta en hepatitis inducida por fármacos y la hepatitis autoinmune. Aquí, además de los síntomas de la hepatitis aguda, los pacientes pueden presentar signos de coagulopatías (facilidad para sufrir cortaduras o sangrado) o encefalopatías (confusión, desorientación y somnolencia). Eventos mortales causados por una hepatitis fulminante, generalmente resulta de diversas complicaciones como edema cerebral, sangrado gastrointestinal, infecciones generalizadas, falla respiratoria y falla de los riñones.

Síntomas de la hepatitis crónica:

En estos casos la enfermedad persiste por más de 6 meses. Este tipo de hepatitis generalmente empieza de forma asintomática y su diagnóstico en etapas tempranas resulta de estudios de laboratorio rutinarios que miden algunos factores relacionados con el hígado.

Conforme se desarrolla la inflamación, los pacientes desarrollarán los síntomas comunes como aquellos presentes en etapas tempranas de la hepatitis aguda. Los cambios de pigmentación de la piel y ojos a un tono amarillento también se presentan, aunque en esta ocasión en una etapa más avanzada de la enfermedad. En este tipo de hepatitis, suceden alteraciones hormonales relacionadas con los procesos normales del hígado, generando algunos síntomas específicos como acné, crecimiento anormal del pelo y en mujeres, ausencia del periodo menstrual.

 Daño excesivo y prolongado al hígado genera cirrosis, una condición en la que el daño al hígado resulta de forma permanente. A su vez la cirrosis puede generar también cambios de pigmentación en piel y ojos, pérdida de peso, coagulopatía, acumulación anormal de liquido en el abdomen e hinchazón de las piernas. La cirrosis puede conllevar a otras complicaciones que ponen en riesgo la vida del paciente como el síndrome hepato-renal, encefalopatía hepática, y cáncer de hígado. 

¿Cuáles son las causas de la hepatitis?

Las causas de la hepatitis a pesar de que comúnmente se asocian con los virus de la hepatitis, también pueden tener otras causas. Algunas que se pueden controlar, otras que se derivan de exponerse al medio ambiente. 

Causada por agentes infecciosos:

Virus

Como ya se mencionó inicialmente, la hepatitis puedes ser causada por infecciones virales. Esta termina nombrándose, dependiendo del virus que este afectando y puede llamarse hepatitis A, hepatitis B, … hepatitis E. La hepatitis viral es el tipo más común a nivel mundial [2].

La hepatitis A y E se comportan de forma similar, ya que ambas se transmiten a través de la vía fecal – oral y ninguna conlleva al desarrollo de hepatitis crónica.

La hepatitis B, C y D, son transmitidas a través de sangre contaminada que entra en contacto con sangre o membranas mucosas. La hepatitis B y C pueden desarrollas hepatitis crónica y aguda, aunque la B es mucho menos probable que se convierta en hepatitis crónica. La mayor cantidad de casos de hepatitis C se convierten en hepatitis crónica y, por lo tanto, es una de las principales causas de muertes por hepatitis a nivel mundial.

Entre 1970 y 1980, las transfusiones de sangre fueron la principal causa de contagio de hepatitis C. Sin embargo, desde que se implementaron las pruebas para detectar virus de hepatitis C en muestras de sangre para transfusiones, los casos de hepatitis C han ido a la baja.

Parásitos y Bacterias

Existen algunos organismos parasitarios capaces de desarrollar hepatitis y cuando son infecciones crónicas también son capaces de desarrollar hepatitis crónica. Así mismo existen algunas bacterias capaces de desarrollar hepatitis. Infecciones por bacterias generalmente desarrollan abscesos, hepatitis aguda y enfermedad hepática crónica.

Causada por alteraciones metabólicas:

Hepatitis alcohólica

El consumo excesivo de alcohol es una causa significativa de hepatitis y en los Estados Unidos es la causa más común de cirrosis. Esta forma de hepatitis se encuentra dentro del espectro de las enfermedades hepáticas por alcohol. Estas varían según su grado de severidad desde la “esteatosis hepática” conocida como hígado graso (forma menos severa y más reversible), hasta hepatitis alcohólica, cirrosis y cáncer de hígado (formas más severas y con menos probabilidades de ser revertidas.

Esta condición se desarrolla gradualmente a través de una exposición constante al alcohol y ocurre en alrededor del 10 al 20% de los alcohólicos. El principal factor de riesgo es la cantidad de alcohol consumido y el tiempo en el cual se estuvo consumiendo. El consumo constante y prolongado de alcohol “en exceso” (80 gramos de alcohol al día en hombres y 40 en mujeres) está asociado con el desarrollo de hepatitis alcohólica [3].

Hepatitis alcohólica

Una cerveza tiene aproximadamente 12 gramos de alcohol. En términos prácticos, hombres que consumen más de un “six” de cervezas al día (mujeres 3 cervezas al día) de forma rutinaria, tienen riesgo de desarrollar hepatitis alcohólica. Esta enfermedad puede terminar en falla hepática.

Hígado graso no alcohólico

Ocurre en personas con poco o nulo consumo de alcohol y está altamente asociado con enfermedades derivadas del aumento de peso como el síndrome metabólico, obesidad, resistencia a la insulina, la diabetes y la hipertrigliceridemia. Estos pacientes muchas veces son asintomáticos o con dolor moderado en la región abdominal cercal del hígado. El diagnostico se realiza con base en valores anormales en estudios rutinarios de función hepática.

Hepatitis inducida por toxinas y fármacos.

Muchos agentes químicos dentro de los cuales podemos destacar a algunos medicamentos, toxinas industriales y suplementos herbolarios y nutricionales pueden causar hepatitis [4]. El daño causado por este tipo de agentes va desde la hepatitis aguda y crónica hasta la falla renal aguda.

Muchos medicamentos pueden inducir un daño hepático. Un ejemplo muy conocido y dependiente de la dosis es el del paracetamol, aunque no sólo los analgésicos pueden desarrollar estas complicaciones, también hay antibióticos, anticonceptivos, esteroides con el potencial de generar daño al hígado.

Los remedios herbolarios y los suplementos alimenticios también pueden desarrollar hepatitis inducida por medicamentos. Tanto así que, en Corea, estas son la principal causa de hepatitis inducida por medicamentos [5]. Mientras que, en los Estados Unidos, se ha reportado que el 16% de los casos de hepatitis inducida por medicamentos están ligados al consumo de estos medicamentos

Otras causas

Además de las mencionadas anteriormente, existen otros factores qué pueden propiciar el desarrollo de la hepatitis, aunque estos en vez de poderse evitar son más bien por predisposición hereditaria. Dentro de estos casos entrarían aquellos con alteraciones genéticas que predisponen a alguien al desarrollo de la hepatitis, así como enfermedades autoinmunes en donde el sistema inmunológico de cada uno ataca las células del hígado desencadenando procesos inflamatorios y daño al órgano en cuestión.

Vacunas

Actualmente solo existen dos vacunas para prevenir el desarrollo de algún tipo de hepatitis viral. Existe la vacuna contra la hepatitis A, la cual se recomienda que le sea aplicada a todos los niños a partir de un año [6]. Además, también está la vacuna contra la hepatitis B, cuya recomendación por parte de la CDC es que se aplique en todos los niños (menores de 19 años) [7]

Como podrás ver, existen muchos tipos de hepatitis y muchos factores causales. Algunas formas de la hepatitis son consecuencia de nuestro estilo de vida y medidas de seguridad mientras que otras tienen un carácter hereditario. Es de suma importancia conocer las principales formas de esta enfermedad, las formas más agresivas y la mejor manera de tratarlas con el fin de mejorar nuestra calidad de vida 

En Family for Life, podemos brindarte opciones naturales de lidiar con estas condiciones y personal capacitado que con gusto te resolverá las dudas que puedas tener respecto a la hepatitis y las opciones terapéutica pertinentes.

Referencias

  1. Vos, Theo; Allen, Christine; Arora, Megha; Barber, Ryan M.; Bhutta, Zulfiqar A.; Brown, Alexandria; Carter, Austin; Casey, Daniel C.; Charlson, Fiona J.; Chen, Alan Z.; Coggeshall, Megan; Cornaby, Leslie; Dandona, Lalit; Dicker, Daniel J.; Dilegge, Tina; Erskine, Holly E.; Ferrari, Alize J.; Fitzmaurice, Christina; Fleming, Tom; Forouzanfar, Mohammad H.; Fullman, Nancy; Gething, Peter W.; Goldberg, Ellen M.; Graetz, Nicholas; Haagsma, Juanita A.; Hay, Simon I.; Johnson, Catherine O.; Kassebaum, Nicholas J.; Kawashima, Toana; et al. (October 2016). “Global, regional, and national incidence, prevalence, and years lived with disability for 310 diseases and injuries, 1990–2015: a systematic analysis for the Global Burden of Disease Study 2015”The Lancet388(10053): 1545–1602. doi:10.1016/S0140-6736(16)31678-6
  2. World Health Organization. (2013)“Hepatitis”. World Health Organization. 
  3. Friedman, Lawrence S. (2015). “Chapter 16: Liver, Biliary Tract, & Pancreas Disorders”. In Papadakis, M; McPhee, SJ; Rabow, MW (eds.). Current Medical Diagnosis & Treatment 2016 55e. McGraw Hill.
  4. Lee, WM; Dienstag, JL (2015). “Chapter 361: Toxic and Drug-Induced Hepatitis”. In Kasper, D; Fauci, A; Hauser, S; Longo, D; Jameson, J; Loscalzo, J (eds.). Harrison’s Principles of Internal Medicine 19e. McGraw-Hill.
  5. Suk, Ki Tae; Kim, Dong Joon (2012). “Drug-induced liver injury: present and future”Clinical and Molecular Hepatology18(3): 249–57. doi:10.3350/cmh.2012.18.3.249
  6. “Hepatitis A Fact sheet N°328”WHO Media CentreArchivedfrom the original on February 21, 2014.
  7. Centers for Disease Control (1999). “Update: recommendations to prevent hepatitis B virus transmission—United States. MMWR 1999”48: 33–4. Archivedfrom the original on May 14, 2016